La casa atemporal (2015)
Esta casa tiene una gotera por la que se escapa el tiempo. Pensándolo bien tiene muchos sitios por donde irse, se escabulle por los drenajes, aprovecha cada vez que abro la puerta o alguna ventana. No me he preocupado por mantenerlo prisionero, la puerta del patio está abierta todo el día, que se vaya si quiere. Pero que se escape a plena luz del día, de noche no por lo sagrado del sueño. El suministro temporal nocturno debe ser de ocho horas y otras tantas extras, disponibles siempre.